Escrito por Gemma Reinón.
¿Qué es una Sociedad Limitada (SL) y por qué es la opción favorita para muchos emprendedores?
Una Sociedad Limitada (SL), también conocida como Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL), es una forma jurídica que limita la responsabilidad de los socios al capital aportado, protegiendo así su patrimonio personal. Esta característica, junto con la simplicidad en su gestión y constitución, la convierte en la opción predilecta para pequeños y medianos empresarios que desean emprender minimizando riesgos.
¿Cuáles son los pasos esenciales para crear una SL?
Crear una SL implica seguir un proceso claro y estructurado, que incluye: registrar el nombre de la empresa, abrir una cuenta bancaria a nombre de la sociedad, redactar y firmar los Estatutos Sociales ante notario, realizar trámites fiscales para obtener el NIF provisional y definitivo, inscribir la empresa en el Registro Mercantil y, finalmente, darse de alta en el IAE y declarar el IVA.
¿Cómo puedo registrar el nombre de mi futura SL?
Para registrar el nombre, es necesario solicitar un certificado negativo de denominación social en el Registro Mercantil Central. Este trámite garantiza que el nombre elegido no esté ya en uso y se puede realizar online. Se recomienda proponer tres nombres distintos para aumentar las posibilidades de éxito en este primer paso.
¿Cuál es el capital mínimo requerido para constituir una SL?
El capital mínimo para constituir una SL es de 3.000,06 euros. Este debe ser ingresado en una cuenta bancaria abierta a nombre de la sociedad en formación, y el banco emitirá un certificado que deberás presentar al notario en el momento de la firma de la escritura de constitución.
¿Qué son los Estatutos Sociales y qué deben incluir?
Los Estatutos Sociales son el conjunto de normas que rigen el funcionamiento interno de la sociedad. Deben incluir, entre otros aspectos, la denominación de la sociedad, el objeto social, el capital social, las participaciones sociales, y la estructura y funcionamiento de los órganos de gobierno. Aunque existen modelos estandarizados, su redacción puede requerir asesoramiento legal para asegurar que se ajustan a las necesidades específicas de la empresa y sus socios.
¿Qué trámites fiscales son necesarios tras la constitución de la SL?
Una vez firmada la escritura de constitución, es necesario solicitar el Número de Identificación Fiscal (NIF) provisional de la sociedad ante la Agencia Tributaria, darse de alta en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y, si procede, realizar la declaración censal de inicio de actividad. Estos trámites son esenciales para poder operar legalmente y cumplir con las obligaciones fiscales de la sociedad.
¿Cómo inscribo mi SL en el Registro Mercantil?
La inscripción en el Registro Mercantil de la provincia donde se ubique el domicilio social es el último paso para la constitución formal de la sociedad. Deberás presentar la escritura de constitución, el certificado negativo de denominación social, la acreditación del depósito del capital social y el NIF provisional. Este paso es crucial para adquirir personalidad jurídica y poder iniciar operaciones.
¿Necesito ayuda profesional para constituir una SL?
Aunque es posible realizar muchos de estos trámites de manera individual, contar con el apoyo de profesionales como asesores, gestores o abogados especializados puede simplificar el proceso, asegurar el cumplimiento normativo y evitar errores que podrían retrasar o complicar la constitución de la sociedad.